Dolores Leis

"No importa cuán lentamente avances mientras no te detengas"

Archivar para el mes “febrero, 2024”

PROMESAS

Fotografía: archivo de internet

Hubo gemidos, roces y sudor. También el sonido de la cama que se negaba a ocultar el deseo del amor prohibido… Y luego silencio.

Alargó la mano para coger un cigarrillo. Hacía años que habías dejado de fumar, pero el olor del tabaco te trajo recuerdos que resultaban molestos; es por eso que, con suavidad, lo retiraste de sus dedos antes de que lo encendiera dejándolo sobre la mesilla que había junto a ti.

― Quiero que me prometas dos cosas.

Te pusiste sobre el costado derecho, la cabeza apoyada en la mano tras flexionar el codo, con la otra dibujabas bucles entre el vello cano que cubría su pecho. Te sonrió con esa sonrisa que tanto te gustaba, pero no dijo nada. Nadie promete algo sin saber primero de que se trata.

― Prométeme que no pasará un solo día, sin que me des los buenos días o las buenas noches. O las dos cosas…― hiciste una pausa, él asintió sin dejar de sonreír ―. Y prométeme también que te enamorarás de una mujer que te haga feliz.

Se le congeló la sonrisa y sus ojos se velaron. Suave, pero firme, te empujó hasta quedar sobre ti, era irresistible el deseo de besarle.

― Lo último no voy a prometerlo, pero ten por seguro que mi mensaje será lo primero que veas al despertar y lo último antes de ir a dormir.

Queda un mensaje mudo en el teléfono, nadie pulsa para abrirlo. Un fugaz destello de la única vez que compartieron algo más que café.

Eras un cadáver con una linda sonrisa.

Dolores Leis Parra

CÍRCULOS

Círculos concéntricos,

así cerramos y abrimos

los ciclos de nuestra vida.

Como árboles

a merced de la tormenta,

un tibio roce basta

para herirnos la corteza.

Mujer,

delante y detrás caminan

tus dos sombras en la noche.

Guiando el sendero.

Guardando la espalda.

Cosida a los talones

y a la punta de los pies.

Los perros dormitan

bajo el faldón del gimnasio,

en los techados de la farmacia,

a la sombra de un farol,

esperando el invierno

envueltos en la neblina

de la calle vacía al amanecer.

Renquea la micro en el asfalto,

engullendo pasajeros

en el oscuro vientre

de fierros y tapicería sucia,

devorando en sintonía

la mañana que se filtra

entre la mugre del ventanal.

Círculos concéntricos

un día sí y otro también,

cerramos uno y en su interior

se traza el primer punto

que dará origen al nuevo principio.

Como los árboles, si nos talaran,

verían nuestra vida

escrita en el interior.

Dolores Leis Parra

Poema incluido en la Antología 50 MUJERES A 50 AÑOS DE… (La Otra Costilla 2023) https://laotracostilla.cl/2023/10/03/antologia-50-mujeres-a-50-anos-de-36/?fbclid=IwAR1E27t3dC5CStf-zB-6w5HwA3VTlebHqtx8mm1gckf7IxjwcGdaaVTTSQI

POSESIÓN

Imagen: archivo de internet

I

Porque es tu sino nadar en dos vertientes

se cumple el dicho

la clandestinidad aumenta el deseo

y te convences de que no existe el pecado.

II

Tardaste décadas en descubrir

que eres dueña de tu cuerpo,

perder el pudor,

dejarte arrastrar por el placer del sexo

sin que tus gemidos

te etiqueten como puta.

III

La oscuridad es una buena aliada

para dar forma a otras manos.

Miles de muertos se engendraron

sobre un lecho vacío.

Dolores Leis Parra

Segundo poema incluido en el número 110 de la Revista Co.incidir (Enero 2024)

Enlace para acceder a la revista completa https://coincidirnuevas1.blogspot.com/

HISTORIAS DE HOSPITAL

Llevaba ingresado varios días, problemas de colon, nada grave.

Le vino a la memoria la melodía de aquella canción de Serrat, niño, deja de joder con la pelota.

El rumor corría de boca en boca por la cuarta planta del hospital. Algunos enfermos pedían al personal que lo echaran para poder descansar, ignorantes de que su presencia era sinónimo de descanso eterno.

¡Niño, deja de joder con la pelota!

Con lo largo que era el pasillo y la tuvo que dejar, justo, en el borde de la escalera.

Dolores Leis Parra

GENERACIÓN PERDIDA

No somos las mujeres que soñaron nuestros padres.

Somos palomas negras despreciadas por distintas,

inadaptadas en una sociedad que busca mutilar sus alas.

Las que por más que caminen jamás llegan a la cima

y aun con las botas destrozadas siguen presentando batalla.

A las que enseñaron el respeto sin ser respetadas.

Mujeres de escoba y puchero con niños colgando en la cadera,

repartiendo codazos para subir al tren del progreso.

Generación perdida en dos mitades de siglo

buscando hacerse un sitio entre el ayer y el mañana.

Siempre a deshora con el fluir del tiempo.

Dolores Leis Parra

CAZANDO MUSAS

A la orilla del viento escapan las palabras.

Peregrina errante de su playa, ves naufragios en la arena. Al sol renace la vida, cuerpos que palpitan al ritmo del fiero rumor del oleaje.

Con la eterna mochila cargada de versos te devuelve el camino hacia sus costas, buscando el tiempo de otoño que está por llegar.

La brújula de la retina señala la silueta, un barco que nadie ve arrojando estelas de vapor entre las nubes. Refugio de otro siglo que muchos desean olvidar.

Persigues la quimera de las musas con la red tejida de tus venas, ágiles y esquivas se esconden tras las dunas, si te acercas huyen antes de rozar la página alba que aguarda por un poema.

A tu espalda, dos torres de edificios desafían el cielo mientras el sueño de café se desvanece tras la puerta cerrada de una calle desierta.

Dolores Leis Parra

De regreso se cumplió el sueño del café. Conocimos a Claudio y Paulina, artífices de Bibliotrueke, un hermoso y cálido lugar dónde conviven la literatura y la cafeína. Ambos realizan, en su Café Literario, una maravillosa labor que promociona la lectura y todas las áreas relacionadas con el arte y la cultura.

Bibliotrueke se encuentra en Playas Blancas, a pocos kilómetros de Las Cruces y fue un placer compartir con ellos y con don Hugo, papá de Paulina, unas horas tan agradables que no nos daban ganas de regresar.

Gracias por abrirnos vuestras puertas y vuestro corazón.

INSTANTE

Ven, recuestate a mi lado,

ámame con la mirada,

que en los ojos perdure

el instante del orgasmo

sumergido en la pupila,

abrazado a las pestañas.

Dolores Leis Parra

SOLEDAD

Imagen: archivo internet

Sin resquicios para un hilo de luz, efímero, perecedero. Oscuridad digna de noche tormentosa, de película de terror sin la guía ni consuelo del relámpago que ilumina la escena. Tentáculos de opresión densa en un ambiente estancado como una charca de lodo.

Te ahogas y no puedes contárselo a nadie.

El latido, cada vez más acelerado, se instala en las sienes, amenaza con reventarlas. Cuesta respirar. Inhalas en busca de un poco más de oxígeno, pero sólo representa un paréntesis, una quimera de alivio momentáneo. El aire que te rodea no resulta recomendable: tóxico, ardiente, aplastante. Quema tus pulmones, obligándote a toser

Inspiras. Espiras. Extiendes las manos buscando alejar las paredes sin pared que se acercan. In. Es. Respiración consciente. In. Es. Controlar el pánico. In. Es. Que empieza a apoderarse de ti.

Visualizas la puerta, la piensas. Dónde podría estar, cómo llegar hasta ella. No puedes permitirte malgastar energía. ¿Hay salida? Cierras los ojos. Escapas de la oscuridad dentro de otra oscuridad. ¿La encontraré alguna vez?

―No te preocupes, Soledad ―escuchas―. Pronto vendrán a por ti.

Dolores Leis Parra

Relato incluido en el libro CONVERGENCIA (autopublicación, 2021)

CIELO ENTELADO «UN DECIR DESDE EL TIEMPO»

Ayer jueves, 15 de febrero, fue el día señalado para desvelar la poesía que se muestra en Cielo entelado (Editorial El Otro Cuarto) de la poeta talagantina Marión Canales.

Según cuenta su editor Daniel Viscarra, en la contraportada del libro, “Cielo entelado es, en palabras de la propia autora, la obra más íntima que ha publicado. Intima en tanto profunda, y es profunda en tanto genealógica: su voz es la voz de los antepasados que conviven con ella -y en ella- dotando de sentido su presente.”

Con gran afluencia de público, Cielo entelado se presentó en el “Café Dulce Hogar” de Talagante, siendo esta la primera de las múltiples presentaciones que tendrán lugar a lo largo de las sucesivas semanas en la provincia. La obra también será presentada durante el mes de marzo en la sede de la Sociedad de Escritores de Chile (SECH) ubicada en la comuna de Providencia en Santiago.

Actuó de maestro de ceremonias Horacio Pino, escritor y artesano de la provincia de Talagante que tras presentar a los invitados y dar unas primeras pinceladas de lo que encontraremos en el libro, dio paso a Julio Rodajo, escritor y docente, que hizo un pormenorizado análisis de la poesía de Marión Canales y de su Cielo entelado.

Cielo entelado metáfora de los ojos que cruzan el velo de la muerte, también es metáfora de advenimiento de la vida.

Aprender a develar sueños desde las raíces que nos hablan. Oír esas voces de nuestra sangre, darse cuenta del instante fugaz que vivimos, para darle espacio a la vida y hacer de una luz eternidad.

No es fácil transmutar, transformar desde el dolor para volver a comenzar. Ser un sobreviviente que acompaña el ejercicio de su respirar, consciente de que es lo único que le pertenece.”

Con estas palabras nos desvela la autora su sentir antes, durante y después del proceso de creación de este proyecto ganador, a través de la Editorial El Otro Cuarto, del Fondo Nacional de Desarrollo Cultural y las Artes (fondart) para el Libro y la Lectura 2023.

Marión Canales quiso compartir el protagonismo del acto con los presentes, así fue como invitó a leer a algunos de los alumnos del Taller de Poesía “El Gato Encerrado”, impartido por ella, que la acompañaban esa tarde. El poema Crianza del desapego, dedicado a su abuela, en voz del escritor Ewaldt Schaa, hizo que, al finalizar la lectura, se fundieran en un emotivo abrazo, al reconocer en tan bellas palabras el espíritu de quien fuera Mamita Vieja de ambos.

La música también estuvo presente en la velada, Valentina Stark, cantante y compositora montina, fue la encargada de cerrar el lanzamiento de Cielo entelado, quedando emplazados a disfrutar de los hermosos versos que, como un velo que se retira lentamente, se irán asomando entre sus páginas.

Si quieres conocer más de la autora y su obra te invito a visitar sus redes sociales

Facebook: https://web.facebook.com/marion.canales.3

Instagram: @canalesmarion

Cielo entelado se puede adquirir, junto a otros títulos de su catálogo, en la página de la editorial: https://elotrocuarto.cl/

Dolores Leis Parra

CUENTO DE INVIERNO

Pegada a la ventana, naricilla fría, observa el blanco manto que llega con la noche.

En la calle, buscando resguardar el cuerpo helado, envidia el punto que no empaña el cristal.

Nieve negra en noche blanca.

Frío y soledad.

Dolores Leis Parra

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